EL VENDEDOR MAS GRANDE DEL MUNDO

En esta oportunidad quiero compartirles un poco de la historia del libro EL VENDEDOR MAS GRANDE DEL MUNDO,  el cual nos cuenta la historia de Hafid, un pobre camellero y como logró convertirse en el vendedor más grande del mundo, gracias a la ayuda de diez pergaminos que les brindo su patrón, Pathros, en los cuales describe toda una filosofía de vida y como esta logro otorgarle los buenos hábitos para lograr el éxito. Les dejo parte de lo escrito en los diez pergaminos, espero sea de su agrado.

PERGAMINO UNO

Hoy comienzo una nueva vida.

Hoy nazco de nuevo y mi lugar de nacimiento es una viña donde hay fruto para todos. El fracaso, como el dolor, es ajeno a mi vida. Comenzare mi viaje sin el estorbo de los conocimientos innecesarios. Solamente los principios perduran, estos pergaminos me enseñaran a evitar el fracaso ¿Qué es el éxito sino un estado mental? El fracaso es la incapacidad del hombre de alcanzar sus metas en la vida, cualesquiera que sean. Los buenos hábitos son la clave de todo éxito. Me formare buenos hábitos y seré esclavo de estos hábitos. Debo disciplinarme a mí mismo. Comenzare a despertar todas las mañanas con una vitalidad que no he conocido nunca. Mi deseo de enfrentarme con el mundo dominará a todos los temores que antes me asaltaban. Todo acto se hace fácil con la práctica. Me hago el solemne juramento de que nada retardara el crecimiento de mi nueva vida. Caminaré erguido entre los hombre y no me reconocerán, porque soy un nuevo hombre con una nueva vida.

PERGAMINO DOS

Saludare este día con amor en mi corazón.

Solo el poder invisible del amor puede abrir el corazón del hombre. Haré del amor mi arma más poderosa. De aquí en adelante contemplare todas las cosas con amor y naceré de nuevo. Elogiare a mis enemigos, animare a mis amigos. Cuando sienta la tentación de criticar me morderé la lengua; cuando este inspirado a elogiar, lo pronunciaré a los cuatro vientos. Amare a todas las clases de hombres porque cada uno tiene cualidades dignas de ser admiradas aunque estén ocultas. El amor será también mi escudo para resistir los dardos del odio y las lanzas de ira.  Principalmente me amaré a mí mismo, vigilare celosamente todo lo que entra en mi cuerpo, en mi mente, mi alma y mi corazón. De aquí en adelante amaré a toda la humanidad. No tengo tiempo para odiar, solo tengo tiempo para amar. Saludaré este día con amor y tendré éxito.

PERGAMINO TRES

Persiste hasta alcanzar el éxito

En este mundo no nací en derrota , ni el fracaso corre por  mis venas. Los premios de la vida se encuentran al final de cada jornada. Siempre daré un paso más. Si ése no es suficiente daré otro y aún otro. Jamás aceptaré la derrota. Pasaré por alto los obstáculos y mantendré los ojos fijos en las metas. Persistiré con las convicción de cada vez que fracase y aumentaran las posibilidades de éxito. Persistiré, persistiré y persistiré de nuevo. No permitiré jamás que ningún día termine en fracaso. Saludare el nuevo día con confianza de que este será el mejor día  de mi vida.

PERGAMINO CUATRO

Soy el milagro más grande de la naturaleza

Soy  una criatura única. Dentro de mi arde una llama que a pasado a través de incontables generaciones. Proclamare mi singularidad en el mundo. No haré más intentos vanos en imitar a otros. Soy un ser único de la naturaleza. Tengo un potencial ilimitado. Puedo mejorar en un ciento por ciento más mis éxitos de ayer. Puedo realizar mucho más de lo que he realizado. Estoy aquí con un propósito y ese propósito es crecer. Practicaré y mejoraré y puliré las palabras que pronuncio. Procuraré constantemente mejorar mis modales y atractivos. Mis oportunidades y sufrimientos no son en realidad grandes oportunidades veladas. Venceré, puesto que soy único.

PERGAMINO CINCO

Viviré este dia como si fuese el último día de mi vida

No perderé ni un momento siquiera en lamentarme por las desgracias del ayer. El ayer se ha quedado sepultado y no pensaré más en él. El mañana yace sepultado con el ayer y no pensaré más en él. Viviré este día de mi existencia. Soy en realidad un hombre afortunado porque se me ha permitido vivir un día extra. La vida nada es sino una medida del tiempo. Trataré con ternura y afecto cada hora, porque no retornará jamás. Eludiré todo aquello que mata el tiempo. A la indecisión destruiré con la acción. Soy un Hombre que siente cariño en su corazón y hoy es mi última oportunidad de demostrar mi cariño. Los deberes de hoy los cumpliré hoy. Y si este es mi último día, será mi monumento más grande. Este día aprovecharé los minutos hasta su máximo.  Mi último día deberá ser mi mejor día, y si no es mi último día daré gracias.

PERGAMINO SEIS

Hoy seré dueño de mis emociones

Cada día amanezco con estados de ánimo que han cambiado desde ayer. La tristeza de hoy contiene la simiente del gozo del mañana, Yo elaboro mi propio tiempo, es decir lo llevo conmigo. Débil es aquel que permite que sus pensamientos controlen sus acciones; fuerte es aquel que manda a sus acciones que controlen sus pensamientos. Solo aquellos con habilidad inferior podrán estar siempre a su nivel mas alto, y yo no soy alguien inferior. Comprenderé y reconoceré los estados de ánimo de aquel a quien visite. Toleraré  su enojo y su irritación de hoy porque no sabe el secreto de dominar su mente, No juzgare más a un hombre. Este secreto será la llave que me abre las puertas de la riqueza. Reconoceré e identificaré el estado de ánimo de la humanidad y en mí. Dominaré mis estados de ánimo mediante una acción positiva. Hoy controlo mi destino. Seré dueño de mi mismo. Seré grande.

PERGAMINO SIENTE

Me reiré del mundo

De aquí en adelante cultivare el hábito de la risa. Y especialmente, me reiré de mi mismo porque el hombre es lo más cómico cuando se toma demasiado en serio. Si me confrontan o una acción que me ofenda o provoca mis lágrimas y maldiciones, tres palabras aprenderé a repetir hasta que se conviertan en un hábito: Esto también pasará. Pintare este día con risas. Nunca trabajaré para ser feliz, trabajaré con ahínco para no estar triste. Y con mis risa todas las cosas quedarán reducidas a su justa medida. El día será triunfante sólo cuando mis sonrisas provoquen sonrisas en otros. De aquí en adelante derramare solamente lágrimas de sudor. Y mientras pueda reírme no seré jamás pobre. Solamente con la risa y la felicidad puedo convertirme en un verdadero éxito. Seré feliz, tendré éxito.

PERGAMINO OCHO

Hoy multiplicare mi valor en un ciento por ciento

Mi fracaso, mi desesperación, mi ignorancia y mis inhabilidades son la oscuridad en el cual he sido plantado a fin de madurar. Tengo el poder para escoger mi propio destino. Fijare metas para el día, la semana, el mes, el año y mi vida. Recordaré mis mejores trabajos del pasado y los multiplicare en un ciento por ciento. Nunca me preocuparé de que mis metas sean demasiado elevadas. Los  hombres deben tropezar con frecuencia antes de llegar a su hogar. Hoy sobrepasaré toda acción que realicé ayer, mañana subiré más alto que hoy. Seré como mi propio profeta, y aunque todos se rían de mis declaraciones conocerán mis sueños. Ampliare mis metras tan pronto como las haya alcanzado. Proclamaré siempre mis metas al mundo, y sin embargo nunca proclamaré mis éxitos. Y cuando haya realizado esto, lo repetiré de nuevo y de nuevo.

PERGAMINO NUEVE

Procederé ahora mismo

Todo carece de valor a menos que sea seguido por la acción. La acción es mi alimento y bebida que nutrirá mi éxito. La demora fue hija del temor, ahora lo reconozco. Para conquistar el temor debo siempre proceder sin vacilación. No eludiré las tareas de hoy, ni las postergare para mañana, porque sé que el mañana nunca llega. Acción, lo pronunciaré cuando despierte al saltar de mi cama, mientras el fracaso duerme una hora más. Solamente la acción determina mi valor, y para multiplicar mi valor multiplicare mi acción. Trabajaré cuando el fracasado busque descanso. Porque el ahora es todo lo que tengo. Mañana es el día cuando lo malo se vuelve bueno, y yo no soy malo. Ya siento la sed del éxito, siento la sed de felicidad y paz mental. El éxito no espera, si demoro, será como una novia que se casará con otro y la perderé para siempre, yo soy el hombre.

PERGAMINO DIEZ

¿Qué hombre tiene tan poca fe que en un momento de gran desastre y de angustia no ha invocado a su Dios? Todos los seres poseen el instinto de clamar pidiendo ayuda. De aquí en adelante oraré, pero mis clamores pidiendo ayuda, serán solo clamores pidiendo dirección. Solo oraré por directivas y orientaciones; a fin de que se me señale el camino para adquirir lo que pido. Oh creador de todas las cosas ayúdame, porque sin tu mano que me guíe me extraviare en el camino que conduce al éxito y la felicidad. Guíame a fin de adquirir la habilidad para aprovechar mis oportunidades. Ayúdame a permanecer humilde. Guíame a fin de que pueda arrancar las semillas del éxito, ayúdame a vivir hoy como si fuera mi último día. Guíame en mis palabras, disciplíname. Báñame en buenos hábitos a fin de que los malos se ahoguen. Pero que todas estas cosas sean así si es tu voluntad. Guíame, ayúdame, señálame el camino. Déjame ser todo lo que tienes planeado para mí.

Espero haya les haya gustado. Para los que quieren leer el libro completo lo dejo en el blog, junto con otros que puedan ser de su agrado.